La existencia de agua a un metro de profundidad, procedente del cauce del Valderaduey, impide soterrar el trazado del Tren de Alta Velocidad (TAV) a su paso por la capital, puesto que el coste de la inversión sería elevadísimo y causaría problemas técnicos.
En la parte positiva, el responsable del Ejecutivo central apoyó la creación de una parada en la comarca de Sanabria, que daría salida al Norte de Portugal hacia Europa por Alta Velocidad, explicó el portavoz de la Plataforma Pro AVE, Manuel Crespo, al término de la reunión mantenida con el Subdelegado del Gobierno, Carlos Hernández Figueruelo.
En cuanto a las dificultades para el soterramiento , otro inconveniente estaría en que el enterramiento de la línea tendría que comenzar a realizarse mucho antes del término municipal de Coreses, puesto que «el TAV sólo puede bajar un metro por cada kilómetro».
La alternativa al soterramiento no es otra que «el alargamiento del túnel de Valorio hasta el puente de la carretera», el de La Lamedilla, y la construcción de otro paralelo a ése para completar el servicio, señala el portavoz de la Plataforma. El túnel existente tendrá que rebajarse varios metros para dar cabida a los postes de los cables de la luz del AVE (catenarias). Además, se aclaró que el Tren de Alta Velocidad no circunvalará la ciudad y que se recurrirá a los pasos subterráneos o elevados para no dividir la ciudad. Los túneles se disimularán para evitar el impacto medioambiental
Por otro lado, la parada en Sanabria permitirá absorber un importante potencial de viajeros y dar servicio a Braganza, lo que la convertiría en rentable a pesar de la escasa población que se asienta en la comarca zamorana.
Esta lanzadera se habilitaría bien «en Pedralba, bien en Remesal, donde se localiza el punto de cruce de varias vías». En Puebla de Sanabria resultaría imposible porque «el túnel que viene desde el valle del Tera llega hasta debajo de esa estación y sale en Lobeznos, por lo que no quedaría espacio» suficiente para que el tren pueda realizar la parada, concluye Crespo.
Por su parte, el representante del Ejecutivo central, subrayó que lo fundamental «es asegurar que el trazado pase definitivamente por Zamora, que no se vea perjudicado». Al tiempo, puso el acento «en limar aspectos como el impacto ambiental y evitar la ruptura de la ciudad en dos» con la nueva línea férrea.
Respecto a la parada en Sanabria, se refirió a las lanzaderas que existen en otras líneas de AVE, como Sevilla, para indicar que habrá que estudiar la posibilidad de que aquellos trenes que no sean de recorrido directo hacia Galicia puedan parar en Sanabria. En cualquier caso, «primero hay que fijar el trazado y luego articular las formas de conexión», afirmó Hernández Figueruelo.
Por lo demás, confirmó a la Plataforma que se están cumpliendo los plazos de licitación de los tramos del TAV en la provincia, que en este momento «se está haciendo la redacción del proyecto del tramo de la capital y la empresa de ingenieros que lo está haciendo especificará qué dificultades y qué soluciones habrá para hacer los túneles», concretó Manuel Crespo.
Finalmente, el subdelegado dio el visto bueno a la conversión en autovía de los 50 kilómetros que separan las localidades de Montamarta y Mombuey, una vieja reivindicación de la Plataforma. En estos momentos «se está estudiando cómo se hará», añadió el integrante de esta organización ciudadana.
Respecto de la reapertura de la línea férrea Ruta de la Plata, el subdelegado se limitó a manifestar que en el próximo consejo de ministros habrá noticias. La Plataforma confía en que sean en el sentido de presentar una propuesta para la reutilización de la misma.
